Casas prefabricadas rústicas
En pleno siglo XXI parece imponerse lo rectilíneo, plano, cúbico o prismático en lo que a estilos arquitectónicos se refiere. Sin embargo, lo tradicional y las casas prefabricadas rústicas, siguen siendo a día de hoy la opción más hogareña o acogedora para mucha gente a la hora de elegir la imagen de su vivienda.
Los tejados con pendientes y teja convencional, aleros revestidos en tarima nogal oscuro, dinteles de madera en los cabeceros de las carpinterías, puertas y ventanas de madera maciza y contraventanas, ventanas con perfiles PVC imitación madera, porches con estructuras portantes de madera maciza, pilares, cerchas, etc. son algunos de los elementos más característicos del estilo de casas prefabricadas rústicas.
Incluso para los más tradicionales, también se da la opción de resolver las fachadas con traviesas horizontales solapadas de madera tratada, al más puro estilo montañés.
No obstante, en Cofitor Casas Prefabricadas hemos dado una vuelta de tuerca más, intentando encontrar un nexo de unión entre las casas prefabricadas rústicas y las modernas, buscando líneas mixtas novedosas que recojan lo mejor de cada estilo, con el fin de crear viviendas atemporales, que evoquen detalles de antaño conviviendo con otros de vanguardia.
Esto se consigue, por ejemplo, combinando fachadas discontinuas con siluetas quebradas y prolongadas en petos, entre los cuales quedaría integrada la cubierta inclinada tradicional con teja cerámica, o mediante la combinación de acabados en madera y piedra premontada de diversos diseños y composiciones, o incluso la integración de grandes ventanales.
Todo ello, eso sí, debemos hacerlo siempre de acuerdo con las Normativas Urbanísticas de aplicación al entorno correspondiente, ya que en algunos casos marcarán la línea a seguir con el fin de respetar las características culturales o ambientales del paraje al cual va destinado el edificio en cuestión.
En definitiva, lo que buscamos es mantener el ritmo de innovación impuesto por los avances socioculturales, sin perder la esencia de las casas prefabricadas rústicas.